Cómo no recordar a la maestra que nos enseñó a clasificar los conocimientos para darle un lugar en los estantes; a comprender la estructura de la tabla de clasificación decimal de Melvil Dewey, que clasifica el conocimiento dígito por dígito, por clases, divisiones y secciones específicas.
Elisa Morales Flores fomentó el uso de la informática en los servicios bibliotecarios desde la teoría y la práctica, para lo cual no solo organizó eventos y talleres sobre sus múltiples beneficios y ventajas, sino que además escribió un libro.
Escribe
Rebeca Elisa Morales Flores de Celestino, bibliotecaria, investigadora y docente nació el 16 de febrero del 1936 en Trujillo, La Libertad. Estudió en el colegio Rosa de Santa María de Breña. Se formó en la Escuela Nacional de Bibliotecarios del Perú, egresando con el título de Bibliotecaria en 1954.
Era una joven muy estudiosa, estuvo en constante aprendizaje, siguió cursos de especialización y posgrado, en Perú, Francia y Brasil entre los años 1962 y 1965.
Recibió el grado de bachiller en Letras con especialidad en Antropología por la UNMSM en 1968.
En 1984 obtuvo la licenciatura en Bibliotecología y Ciencias de la Información por la UNMSM. En 1991 se asoció al Colegio de Bibliotecólogos del Perú, CBP-110.
Elisa Morales Flores fue parte de una generación de bibliotecarios a la que su país le encomendó una noble misión: contribuir al desarrollo educativo y cultural.
Desde 1955 trabajó en la Biblioteca Nacional del Perú hasta 1969, año en que dejó de trabajar para formar una familia con su esposo Juan A. Celestino Fernández. Su hogar fue bendecido con la llegada de sus tres hijos: Zuni, Carla y Álvaro.
Su trabajo fue reconocido por el padre de la bibliotecología nacional, Jorge Basadre Grohmann, que la menciona en Recuerdos de un bibliotecario peruano, destacando los artículos publicados por Elisa Morales Flores en el número 18 de la revista Fénix en 1968, titulado: “Esquemas desarrollados de la Clasificación de Dewey: 985.0091-985.01 (Servicios Técnicos)” y su trabajo “Índice epigráfico correspondiente a los números 913, 85; 918.5 y 985 de la Clasificación Dewey”, publicado en Fénix, números 19 al 21, 1960-1971.
Mientras tanto realiza trabajos en el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo de la Educación (Inide), el Centro de Información del Mar, entre otros.
Presidió la Asociación de Bibliotecarios del Perú (ABP) en el período 1980-1982, trabajando por el desarrollo de los bibliotecarios. Durante su gestión se impulsaron proyectos de ley, reformas de estatutos para modernizar la organización de la ABP, lo que permitió posteriormente su conversión a Colegio Profesional. Por esa época se contaba con el apoyo de la señora Mercedes Tijero de Alayza, primera bibliotecaria elegida diputada.
En 1981, en asamblea de la ABP acuerdan enviar un memorial al rector de la UNMSM, Dr. Gastón Pons Muzzo, solicitando se implemente la licenciatura en Bibliotecología y Ciencias de la Información y se gestione que “… todos los bibliotecarios puedan optar a dicho grado…”. (El Comercio 13/3/1981)
Ese mismo año se lleva a cabo el II Congreso Nacional de Bibliotecología e Información.
En mayo de 1984 fundó con sus colegas María Luisa Cavero Monge y Rosa Panizo Uriarte la empresa Bibliotecnic Consultores S. A., especializada en bibliotecas y archivos. El objetivo fue brindar asesoramiento y consultaría para diseño y ejecución de proyectos, programas de desarrollo de bibliotecas y afines. Desde 1986 fue gerente de proyectos en la mencionada empresa.
El 1989 organiza con Bibliotecnic Consultores y con auspicio del Concytec, el Seminario Nacional de Informática en la Biblioteca.
Entre 1996-1999, fue nombrada directora del Centro de Servicios Bibliotecarios Especializados, CSBE. En agosto de 1997 la jefa Institucional de la BNP, Martha Fernández, le solicita que asuma la Dirección General de Servicios Públicos y Especializados de la BNP.
En 1999 le encargan la Dirección Ejecutiva de Servicios e Investigaciones Bibliográficas hasta agosto del 2000, en la que se retira por cuestiones éticas.
Siempre activa continuó con sus trabajos en Bibliotecnic Consultores, organizando en el año 2004 el curso virtual Gestión del Conocimiento y Gestión de la Información.
Su aporte bibliográfico
Elisa Morales de Celestino comprendió que es importante desarrollar investigaciones de la especialidad y publicarlas como material de consulta, siempre estuvo cerca de la pluma y el tintero aportando ideas, investigando, recopilando información. Su producción bibliográfica es abundante y fueron publicadas en boletines, folletos, y revistas de la ABP, BNP, Ridecab, Inide, Infobib.
La maestra destacó por su inteligencia contundente y expansiva. Fue una visionaria a su modo que con la llegada de la tecnología vio los cambios que se avecinaban en el mundo de la información. Escribió su libro: Informática en la biblioteca: ¿una necesidad o un reto? (Lima: Bibliotecnia Consultores, 1988, 260 pp.)
Obra fundamental en la modernización de los servicios bibliotecarios por los múltiples beneficios que el uso de la informática aportó al desarrollo de las bibliotecas en el mundo. Su obra empieza con una interrogante clave para la época: ¿Cómo y por qué automatizar las unidades de información bibliográfica y documentaría?, desarrollando temas como la planificación para el cambio, los soportes de la automatización, la automatización de bibliotecas, la teleinformática, y cómo se responde al reto.
Su lectura permitió redefinir el papel de las bibliotecas y bibliotecarios para adaptarse a la era de automatización de bibliotecas en nuestra región.
Su Legado
Dedicó su vida a entregarle al país su docencia y enseñanzas para formar profesionales con la mística de aquellos años. Estuvo presente en los momentos claves de la bibliotecología contribuyendo en su desarrollo como bibliotecaria, docente, investigadora, autora de obras de la especialidad.
Falleció el 18 de diciembre del 2023 en Lima, habiendo cumplido muchas de sus metas trazadas, dejando en el tintero otros sueños. Ahora nos vuelve a convocar a todos los que aprendimos de sus enseñanzas para dejarnos su clase maestra de vida y recordemos el legado que nos entregó. Fue una maestra presente en la formación académica de varias promociones de la Escuela Nacional de Bibliotecarios y en la Universidad Femenina del Sagrado Corazón, lugares donde ejerció la docencia.
Por eso el mayor homenaje a la bibliotecaria más importante de su generación es escribir sobre su vida y obra para entregar a los jóvenes bibliotecarios su memoria y mística, su fe, su doctrina, su sabiduría de maestra y clasificarla en un lugar muy especial del archivo más hermoso que existe, nuestra memoria colectiva.
El Colegio de Bibliotecólogos del Perú le rindió un homenaje a casi un año de su partida con una Distinción Honorífica, el 8 de noviembre en ceremonia protocolar por el Día del Bibliotecólogo Peruano.
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Nació en Ayacucho. Bibliotecólogo de profesión con más de cuarenta años de experiencia. Narrador de cuentos, autor-editor de cinco obras de corte infantil-juvenil. Colabora en revistas y periódicos de Huaral. Gestor de los blogs: Bibliotecologia & Literatura, Crónicas de Pauza y Huaral Huaralín. Trabaja en la biblioteca del SENATI. Contacto: fpebe9@yahoo.com