
Basada en las Estrategias de la IFLA para el período 2024-2029, Turquía contribuye a objetivos globales con la aplicación de una hoja de ruta respaldada por sus instituciones gubernamentales.
Redacción Otlet. En Turquía existen más de 1300 bibliotecas públicas representadas por su Biblioteca Nacional, con un apoyo decisivo de su Ministerio de Cultura y Turismo, el cual ha invertido significativamente en la modernización de los espacios bibliotecarios. «Las bibliotecas se consideran cada vez más centros comunitarios que promueven el aprendizaje permanente, la cohesión social y el enriquecimiento cultural», señala Merve Yavuzdemir, jefa de Relaciones Internacionales de la Dirección General de Bibliotecas y Publicaciones de Turquía, quien contó en una entrevista para IFLA los resultados de la aplicación de una hoja de ruta en las bibliotecas públicas de dicha nación.
En Turquía todos los bibliotecarios del país reciben la misma remuneración. Asimismo, el enriquecimiento anual de las colecciones bibliotecarias y la continuidad de los gastos operativos en la infraestructura están garantizados. Además de eso, reciben apoyo a través de mecanismos nacionales para financiar e impulsar proyectos desarrollados localmente. «Este modelo permite a las bibliotecas operar con seguridad bajo una gobernanza central, manteniendo al mismo tiempo la flexibilidad para diversificar sus servicios en función de las necesidades locales de los usuarios», explica Yavuzdemir.

La modernidad de los servicios bibliotecarios también facilitan el acceso. Por ejemplo, los ciudadanos turcos pueden acceder a todos los servicios de cualquiera de sus bibliotecas públicas de manera gratuita con un único registro, gracias a un sistema de membresía.
Asimismo, hay bibliotecas móviles que llegan a comunidades remotas o desatendidas, contando también con bibliotecas en aeropuertos, estaciones de tren, centros comerciales, hospitales y prisiones.
Planificación
Yavuzdemir comenta la importancia que ha tenido la planificación y la participación de las bibliotecas en los planes nacionales: «Realizamos importantes esfuerzos de promoción para garantizar que las bibliotecas se incluyan en la estrategia general del país. Esta promoción se refleja en el documento de estrategia oficial de nuestro Ministerio de Cultura y Turismo, que protege nuestros objetivos fundamentales para el desarrollo de la bibliotecología».
En ese sentido, las bibliotecas de cada ciudad celebran reuniones periódicas para coordinar, bajo la dirección de las Direcciones Provinciales de Cultura y Turismo, los planes de acción para alinear el trabajo local con las prioridades nacionales.
De este modo, a través de la hoja de ruta, que se basa en las estrategias de la IFLA para el período 2024-2029, Turquía contribuye a objetivos globales más amplios.
Diplomacia bibliotecaria
Como jefa de Relaciones Internacionales de la Dirección General de Bibliotecas y Publicaciones, Merve Yavuzdemir participa activamente en iniciativas de diplomacia cultural.
En 2024, contribuyó al fortalecimiento de la presencia de Turquía en el ámbito editorial y bibliotecológico en 37 países de seis continentes, desde Azerbaiyán, India y Emiratos Árabes Unidos hasta países como el Congo, Malasia, Australia, México, Chile y Hungría.

«La diplomacia bibliotecaria, como una forma de poder blando, no solo fortalece los lazos entre las naciones, sino que también promueve soluciones innovadoras y sostenibles a los desafíos compartidos», aconseja.