¿Se puede hablar de una catalogación bibliográfica crítica? La respuesta es sí. De hecho, ha sido uno de los temas principales en los eventos realizados al respecto en la región.
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Catalogación no es solo aplicar reglas, tampoco es trabajar solo con formatos impresos. Pensé que está visión era de las personas mayores, pero lamentablemente no es así, lo percibí durante un evento de estudiantes y egresados de bibliotecología. Filipe Reis, en su presentación titulada “Os kairos para uma formação catalográfica crítica”, expone que falta cambiar la educación catalográfica, que muchas veces se entiende como solo técnica, por tanto, si aprendemos sin cuestionar, no aprendemos, estamos siendo adoctrinados; la crítica es para la progresión, creo que esta idea también aplica en el desarrollo profesional.
Durante la pandemia se han desarrollado una serie de eventos sobre catalogación en los diversos países de la región, la virtualidad ha permitido a los profesionales ampliar sus conocimientos y conocer diversas experiencias, así como los avances en la región respecto a la aplicación de RDA. A finales de octubre se desarrolló el IV Coloquio sobre RDA en América Latina y el Caribe “Innovaciones en la RDA e implicancias para su implementación en las bibliotecas de América Latina y el Caribe”.[1]
En noviembre, el VIII Encuentro Nacional de Catalogadores “Tratamiento y organización de la información para dinamizar los servicios técnicos” de Argentina, contó con 3 talleres: recursos continuos, catálogo de autoridades nacionales —específicamente sobre nombres personales—, y sobre catalogación de materiales especiales.[2] Ese mes también se llevó a cabo el II Encontro de RDA no Brasil, siendo los ejes temáticos: 1. Fundamentos relacionados al RDA; 2. Aplicación de RDA en Bibliotecas; 3. Aspectos tecnológicos aplicados a RDA; y, 4. Docencia e investigación en RDA.[3]
Estos tres eventos contaron con conferencias magistrales e invitados internacionales como Chris Oliver, RDA Board Chair; o Pat Riva, IFLA Advisory Committee on Standards; entre otros. Si bien las presentaciones de los invitados extranjeros de habla no castellana fueron traducidas, en algunos casos dobladas o subtituladas, el evento brasileño fue el más inclusivo al contar de forma permanente con una intérprete de lengua de señas.
De las diversas experiencias expuestas, muchas coincidían en ciertos puntos respecto a la implementación de RDA, y que pueden aplicar para otros proyectos. Pueden parecer elementos obvios; pero no es así.
Capacitación. Es elemental y debe ser continua e incluir a los auxiliares y personal de todas las áreas. Dentro de este punto también se puede mencionar la adquisición de bibliografía especializada.
Herramientas. Son elementos básicos para realizar el trabajo y tomar decisiones. Muchas veces el tema de presupuesto o decisión de las autoridades deja de lado este punto relevante. Cuando le preguntaron a Chris Oliver respecto al costo de RDA para países que no cuentan con demasiados recursos, mencionó las opciones como suscripción por consorcios a través de las bibliotecas nacionales.
Tiempo. La implementación de las RDA es un trabajo a largo plazo, ya que involucra capacitación, reuniones de trabajo, desarrollo de políticas/lineamientos los cuales deben estar en constante revisión, construcción de nuevas plantillas para los registros, reuniones con las personas de soporte tanto para los sistemas como para la visualización en los catálogos.
Trabajo en equipo. El intercambio de opiniones, conocimientos conllevan a mejores resultados e incentiva a los trabajadores.
Comunicación. Necesaria para el buen desarrollo de las actividades. Si bien existen muchas tecnologías de la comunicación, esta se vio afectada durante la pandemia por la no presencialidad.
Respecto a la implementación de las RDA en nuestro país, no existen investigaciones como las presentadas por los colegas argentinos, brasileños y mexicanos en estos eventos. En el 2019 presentamos el caso en una universidad peruana “RDA: catálogo de autoridades en línea de una biblioteca universitaria peruana”. Si bien la Biblioteca Nacional del Perú las viene aplicando desde enero del 2021, aún se están desarrollando las políticas y lineamientos para la aplicación del estándar RDA, que son la base para el trabajo. Esto en línea con los proyectos y acciones que se realizarán #RumboALos200Años, presentados en septiembre de 2020, y que en el Eje 4. Modernización de los procesos bibliotecológicos menciona, entre otros, la realización de eventos especializados, así como encuentros de catalogadores y la creación de un grupo RDA Perú.
En el estudio presentado por Heytor Diniz en el evento argentino remarcó “el trabajo coordinado y liderado entre las principales instituciones bibliotecarias del país, como indica Oliver (2011), siendo ellas una fuente de referencia para las demás, como un paso necesario y fundamental para la difusión del código RDA en Brasil”, en ese sentido considero que la BNP, al desarrollar sus proyectos, permitirá que más bibliotecas peruanas puedan también implementar y hacer más visible la labor e importancia del catalogador.
Alguna vez un compañero de trabajo me dijo: “Hay que ver a la biblioteca como el cuerpo humano: si un órgano falla, no funcionará bien”.
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Notas
[1] Cronograma de conferencias, Canal de YouTube. Sobre los coloquios anteriores.
[2] Página web, Canal de Youtube.
[3] Página web, Canal de Youtube.
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Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información por la UNMSM, bachiller en Educación y egresada de la Maestría en Museología y Gestión Cultural de la Universidad Ricardo Palma. Lleva siete años profundizando en el área de catalogación en bibliotecas universitarias y en la Biblioteca Nacional del Perú, donde laboró, por un tiempo, en el Centro Bibliográfico Nacional. Le interesa también la evolución de las bibliotecas como espacio físico, así como los temas referidos a educación y cultura. Actualmente cursa una Maestría en Educación con mención en Informática y Tecnología Educativa en la Universidad de San Martín de Porres. Contacto: mlcastrocaceres@gmail.com
Se estila incluir el nombre de la institucion donde se labora y el correo electronico de l@s autor@s para posibles comunicaciones si fuese de interes de los lectores. Les recomiendo que incluyan esos datos.
Gracias por su sugerencia, estimado Rubén. Lo tendremos en cuenta.